El Tercer Tiempo en Rugby

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Si hay algo que caracteriza todavía más el rugby que el balón ovalado, es el fair play. Uno de los pilares de este deporte es el mutuo respeto entre los participantes, incluidos los árbitros, cuyas decisiones no deben cuestionarse en el campo. La competitividad se queda en el terreno de juego, y una vez termina el partido ambos equipos la dejan de lado hasta el siguiente encuentro.

En el Rugby Club Valencia, desde pequeños trabajamos estos valores de respeto y compañerismo. Muchos son los ejemplos donde tanto nuestros jugadores como los rivales, feroces a la hora de conseguir el balón, se abrazan y felicitan al final de cada partido, sin importar el resultado que señala el marcador.

Pero sin duda una de las cosas que favorece este fair play y que hace de este un deporte singular, es el tercer tiempo.

El tercer tiempo consiste en reunión post partido, en la que los dos equipos comparten bebidas y comida ofrecidas por el equipo local y confraternizan charlando. En el club, son muchos los jugadores que antaño disfrutaron de estos momentos. Como cuenta Albert Monleón, “en el local de la calle Norte, junto al viejo campo de la Pechina; en el merendero Casa Navarro, en el antiguo paseo de la playa del Saler; o con más brillo en Casa Patilla. Aunque sin duda los que preparaban Nati y José Prieto, con sus delicias gallegas, junto a Jaume Mata y Gloria, y los demás padres de la Generación X eran insuperables. Hoy en día muchos padres siguen preparando con ilusión buenos terceros tiempos.”

Esta tradición se remonta a 1873 en la que tras un partido que enfrentaba a Escocia e Inglaterra, cuando los locales decidieron invitar a una copiosa cena a sus adversarios. Hoy en día estos banquetes se siguen celebrando aunque de manera más discreta y moderada en la élite del rugby. Y como no, en el rugby amateur no se pierde esta maravillosa costumbre con el objetivo de seguir haciendo del rugby un deporte noble caracterizado por sus valores, envidiables para otras prácticas deportivas.

Una tradición que todos los equipos del Rugby Club Valencia siguen manteniendo, desde los más jóvenes hasta los veteranos porque el Rugby no acaba en el campo. Compartimos un deporte que nos convierte en amigos y compañeros.