Rugby calimocho en Moncada.
Buenos días desde la máquina de pergeñar crónicas. Esta temporada se ha unido al equipo de los Jabatos, un elenco de intrépidos jugadores. Y en la presente jornada nos han acompañado: Rahul, Chimo, Germán, Vicente, Emiliano, Héctor, Axel, Carlitos, y Alejandro, que junto a los valerosos: Pau, Gonzalo chico, Mario, David, Manuel, Arnau, Bruno, Alex, Luis y Juancho, han formado parte, este soleado sábado de otoño, de la expedición a l’Horta Nort.
Tras cruzar el barranco del Carraixet, logramos alcanzar las imponentes y adormecidas murallas de la Ciutat de la pilota, a cuya sombra se extiende la pradera del polideportivo de la Pelosa. Que bella estampa, en el verde tapiz: Víctor pasea como un pastor arreando ganado, ahí van las saltarinas cabritas, que no mansos corderitos, contentas y confiadas sin sospechar que los lobos hambrientos siempre están al acecho.
Conseguimos, no sin esfuerzo, poner orden entre el ganado caprino, que rehúsa con desdén las normas del balón ovalado. ¡El que no obedezca se queda sin jugar! Se componen dos equipos para jugar contra un conjunto de Moncada, que parece han acudido con sus hermanos mayores a disputar el encuentro. ¡Pero da igual! Estos valientes y bulliciosos chicos no conocen el miedo.
Toca el silbato Pablo, y a la primera de cambio, Alex ya se lanza como un kamikaze, desafiando sin temor al asombrado adversario. Es Alex uno de nuestros capitanes llamado esta temporada a liderar al equipo. David, veterano en estas lides, le acompaña gallardo en la escaramuza. Aunque el reducido campo de juego, y el numeroso grupo de jugadores deja pocas ocasiones para lucirse con el balón, Gonzalo chico da muestras de bizarría. A Chimo Gargantúa le encanta hacer la tortuga, bajo el empuje de todo el equipo; Germán y Alejandro observan atónitos el rumbo que toma el partido, cada vez más loco y atropellado, les gusta este barullo. Al jaleo y la confusión se ha unido con gusto Vicente, que con sus veloces piernas encuentra siempre un hueco para escapar; Axel entra precavido en el juego, piensa que su oportunidad puede llegar en una mejor ocasión. Y a Carlitos aunque se le escapó la pelota, detiene con arrestos a cualquiera, demostrando su linaje militar.
Este animoso equipo ha mantenido a raya a este fuerte contrincante, con valor y desparpajo.
En la segunda parte otro valiente equipo toma el relevo, este capitaneado por Juancho, que esta temporada da nuevas señales de su astucia y coraje. Pau también está resuelto en jugar bien todos los balones; y Mario vuelve a deslumbrarnos con sus fogosas arrancadas, que iluminan el confuso partido. Rahul y Héctor, cada uno a su manera aportan al equipo nuevos bríos, Rahul con su estilo exótico deudor del Misterioso Continente; y Héctor con su estampa noble y arriesgada. Junto a Chimo otro de nuestros jugadores de choque, es el forzudo Emiliano, presto y desafiante. Manuel y Bruno, avezados jugadores, dan buenos ejemplos a los más jóvenes de cómo atacar la defensa contraria. Pero en este día parece destacar Arnau, muy presente abriendo el juego con criterio, e intentando con acierto cualquier jugada. Mejor todavía, si cabe, ha estado Luis, ejemplo de que el aplicarse en el entrenamiento da sus frutos. Intratable en defensa, incisivo y listo en ataque. Pero sobre todo ha demostrado que si se trabaja bien en el entrenamiento, aumenta el éxito y la diversión en el juego. La precisa carrera recta con brusco cambio de dirección, entrenada el viernes, la practico Luis con gran acierto, sembrando el desconcierto en el equipo contrario. Sin duda hoy Luis ha sido el jugador más destacado.
Podemos decir que el encuentro acabó en unas honrosas tablas (Moncada-6.R.C.V.-6), teniendo en cuenta la ventaja del rival, con el que confraternizamos gustosamente en el tercer tiempo. Un buen partido amigos. Y recordad haced caso a Víctor y Albert, ¡y a entrenar duro chicos!
Gracias como no por la colaboración de los estupendos Papás, y la presencia de las guapas hermanitas y hermanitos.
