El pasado sábado nuestro equipo verde se enfrentó al Tatami, en un duelo tan intenso e igualado como el de principios de temporada. En esta ocasión nos llevamos el partido por un ajustado 5-4, lo que demuestra una vez más la igualdad que existe entre estos dos equipos.
Nuestros jóvenes jugadores empezaron dominando la posesión, tratando de encadenar varias fases de juego para crear huecos en la defensa rival, pero fue el Tatami el primero en encontrar los espacios: un balón perdido en un ruck en la banda izquierda nos costó el primer disgusto, puesto que no teníamos a nadie defendiendo el lado cerrado. El Tatami aprovechó la circunstancia para adelantarse en el marcador, que por cierto nos pasa con demasiada frecuencia contra los equipos más fuertes. Aún así no perdimos los nervios, seguíamos controlando la posesión y fuimos capaces de darle la vuelta al marcador. Cuando nuestros tres cuartos avanzaban con el balón creaban mucho peligro a la defensa rival, aunque a veces retrocedíamos metros por transmitir totalmente parados. Por su parte, la delantera trabajó muy bien, sobre todo en las abiertas, donde el tatami siempre nos exigía mucho, pero en momentos puntuales la falta de apoyos nos hizo perder algunos balones importantes. En fin, llegaba la última parte y el partido estaba como al principio, depués de que los dos equipos hubiéramos disfrutado en algún momento de una ventaja mínima en el marcador. El Tatami tomó la delantera , pero esta vez sí que fuimos capaces de darle la vuelta al resultado y conseguir una victoria muy trabajada. Seguiremos trabajando para no sufrir tanto en los próximos partidos.
QUÉ HEMOS MEJORADO: el trabajo en las abiertas, muy implicados la gran mayoría. También ganamos más orden en el campo, aunque cuando el apertura o el medio melé están implicados en una agrupación nos volvemos un poco locos. Aunque debemos recordar que en defensa no debemos entrar a las abiertas más de una o dos personas.
QUÉ TENEMOS QUE MEJORAR: avanzar SIEMPRE, no podemos pasarnos el balón sin avanzar metros ni presionar sin orden. Tampoco podemos tolerar perder la posesión por falta de apoyos: si un compañero gana metros tenemos que ir con él o perderemos el balón. Y por último, hay que evitar hacer tantos golpes de castigo