Mil cuentos.
Buenos días desde la máquina de pergeñar crónicas. Juan Antonio tiene un balón parlanchín, y por su culpa siempre llega tarde, él piensa que más vale llegar a tiempo que rondar un año; pero no sabe que en el bosque de helechos arborescentes ronda la sombra encantada del tigre.
Además esta mañana pasan muchas muchas cosas, se cuenta que Alberto de Monleone es despedido por su madre por ser el archipámpano de los idiotas y se pone al servicio del ogro Fran, al que no se le ve el pelo por estar atrapado en un gran ágape.
Mientras tanto los partidos de rugby dan comienzo en el país de las cuatro calzadas. Ya se forman las montoneras, hay carreras a través, y caídas en los hoyos y franqueo de puertas; por una de ellas se ha colado Gael, al otro lado se ha encontrado al hijo de un rey y le ha roto la crisma, huye del lugar, caminando sin descanso llega a pueblo donde libera a la hija del rey de un dragón; después de mucho insistir se desposa con la hija del rey; pero luego es embrujado por una mujer y liberado por su hermano Edu el talonador, al que mata por celos; por fin descubriendo su inocencia, con una hierba lo devuelve a la vida.
Debajo de los palos nacen por virtud de un hechizo Javi y Liam; Liam es envidiado por la reina, madre de Javi, que le rompe la crisma. Liam huye, convertido en rey, se ve en gran peligro. Javi, por virtud de una fuente mágica y de un mirto, conoce sus fatigas y acude a su rescate.
Pasan varias jugadas de mérito, y Rubén, rey del pase, se ha enamorado de la voz de una vieja que vive bajo la melé, engañado por un dedo chupado que sabe a caramelo, la recibe en su lecho. Pero nada más darse cuenta del embuste hace que la arrojen por una ventana, y aquélla, que ha quedado colgada de un árbol es hadada por siete hadas, y se convierte en una preciosa muchacha y Rubén la desposa. Pero la hermana de la vieja, envidiosa de su fortuna, porque la pongan guapa se deja desollar y muere.
Muy cerca de la touche Eric es enviado tres veces por su padre a comerciar con cien duros cada vez, y la primera compra un ratón, la segunda una cucaracha y la última un grillo. Despedido a causa de ello por su padre, llega a un lugar en el que cura por medio de estos animales a la hija de un rey y se convierte en su marido.
La charnela que abre todas las puertas la componen Ibu y Víctor son hermanos, uno rico y vicioso, el otro virtuoso y pobre. Tras varias vicisitudes, el pobre es despreciado por el rico y se hace barón del placaje, mientras que el rico, caído en la miseria del ruck, es conducido a la horca; pero es declarado inocente y el hermano comparte con él sus riquezas.
A todo esto si se le da la vuelta al campo verde se puede ver que allí también juegan al rugby con la cabeza de un cerdo. Hay que poner orden en el juego, pero Patri es secuestrada por el viento y llevada a la casa de una ogra, de la cual, tras varios accidentes, habiendo recibido un bofetón, se marcha vestida de hombre y cae en la casa de un rey, donde la reina se enamora de ella y, despechada por no hallar correspondencia, la acusa al marido de haber intentado deshonrarla, por lo que Patri es condenada a la horca. Pero por virtud de un anillo que le había dado la ogra es liberada y, muriendo la acusadora, se convierte en reina. En el mismo cuento, pero en un campo de juego distinto, su amiga María, por mostrarse cortés con una vieja, recibe un hechizo, pero su tía, envidiosa de su buena suerte, la arroja al mar, donde una sirena la tiene largo tiempo encadenada; por fin, la libera su hermano el zaguero mágico, se convierte en reina como Patri y la tía se descuenta de su culpa.
En esta parte del cuento y del campo, el juego es verbigracia de lunas rotas y soles revolucionados. Pablo que no tiene boca, no quiere tener balón. Pero al cabo se amasa uno con sus propias manos. Una reina se lo roba, después de mil vicisitudes y, recuperándolo con maña, se lo lleva otra vez a su casa.
Varios tropiezan y caen por el hoyo, Carlos Montañana, hijo del rey de bastos, sale en busca de sus tres hermanas carnales casadas con un halcón, con un ciervo y con un delfín y, después de largo viaje, las encuentra. Durante el regreso descubre a la hija de un rey encerrada en la torre de un dragón y, con una señal que hace, acuden pronto en su ayuda los tres cuñados, que no son otros más que Sergio, Isma y Marco. Y con ellos mata al dragón y libera a la princesa, con la que luego se casa. Por fin, junto con sus cuñados y hermanas, vuelven al partido.
Esto es el cuento de nunca acabar, tras una melé, un pase caca de la vaca, un ruck-montonet o la jugada de la recojonostiogena, va Álvaro, por complacer a Pablo, sota de oros y hermano suyo, emprende un largo viaje y, aunque a éste le lleva lo que deseaba para librarle de la muerte, lo condenan a muerte. Pero para demostrar su inocencia se convierte en estatua de mármol. Por fin, merced a un extraño suceso, recupera su estado de antes y vive contento.
En eso que Jorge, que es un animal un tractor, después de rendirle cien malos servicios a su madre, le pierde un corte de paño y, tratando tontamente de recuperarlo de una estatua, se hace rico.
El príncipe medio apertura Mateo, por una maldición que le echó una vieja, pasa por grandes penalidades: le roban la pelota, le pisan la cabeza en un ruck, le placan sin balón en el aire…, las cuales se agravan por la maldición de una ogra; al final, merced a la industria de la hija de la ogra, salva todos los peligros, marca un ensayo y desposa a la joven.
La jornada, el cuento llega a su fin, el terreno de juego de tanto vaivén está repleto de touches, saques de 22, golpes de castigo, golpes francos, melés contrariadas, de ogros, hadas, brujas, princesas y príncipes, dragones, reinas y reyes, y resulta que Iván, por virtud de una piedra que encuentra en la cabeza de un gallo, se hace joven y rico; pero dos nigromantes le roban la piedra y se vuelve otra vez viejo y pordiosero. Se lanza pues, a errar por la zona de balón muerto, hasta que llega al reino de los Ratones, tiene noticias de su anillo y, ayudado por los ratones Alex y Héctor, lo recupera, retorna a su estado de antes y se venga de los ladrones.
Pero a pesar de todo ya sabes. ¡Entrena con ganas, y sé fiel a tus amigos!
Muchas gracias, buenas noches. Entrenadores S-10.
